La venta de productos industriales, implica retos y situaciones, que son algo diferentes para las personas encargadas de desarrollar las estrategias del Marketing Industrial.
Las diferencias que existen entre la venta y compra de productos industriales y la compra/venta de bienes de consumo masivo, son marcadas y las analizaremos durante la presente publicación.
El Marketing de los productos industriales
Ante los enormes retos que nos ha impuesto la globalización de la economía, las comunicaciones y, en general, de todos los ámbitos de la vida del ser humano, es absolutamente imprescindible la especialización del mercado.
La alta complejidad de las nuevas tecnologías y los nuevos avances científicos, que no se detienen, han generado un sector industrial que se segmenta y se especializa, cada vez más.
He ahí, precisamente, la enorme importancia del Marketing Industrial, de cara a la implementación de nuevas formas de promoción.
Es necesario, por supuesto, ofrecer y hacer conocer las nuevas tecnologías, mediante las estrategias del Marketing para la Industria, como una respuesta a las necesidades actuales del mercado de productos-especializados-industriales.
Tal y como lo anotábamos en un principio, existen marcadas diferencias entre el tipo de Marketing al que estamos haciendo alusión y el relacionado con los bienes de consumo masivo. En el siguiente acápite, nos referiremos a ello, con más profundidad.
Las diferencias entre el Marketing Industrial y el mercadeo de los bienes de consumo masivo
La primera diferencia, la encontramos en el número de clientes, dado que los productos industriales van dirigidos a sectores que son, usualmente, bastante reducidos, en comparación con el consumo masivo de bienes y servicios.
La segunda diferencia, la podemos apreciar en la mayor importancia que tiene el cliente de los productos industriales, en vista de que los compradores son especializados, al tiempo que el mercado es limitado, por lo que los clientes son bastante más exigentes.
Adicionalmente, este tipo de clientes cuenta con una mayor capacidad de negociación, al tiempo que manejan un mayor poder económico que el usuario medio de los bienes de consumo masivo.
La tercera diferencia, a su turno, consiste en que cada empresa industrial afronta retos diferentes, en razón de lo cual, las necesidades, prioridades y los gustos de los clientes, suelen ser muy específicos y concretos.
En otras palabras: las soluciones industriales deben brindarse “a la medida de lo que pretende el comprador”, por lo que nos es fácil satisfacerlo.
Otro aspecto de gran importancia a tener en cuenta en este tema específico, se constituye por el hecho de que, generalmente, los productos industriales necesitan de un sistema de apoyo post-venta, caracterizado por cuatro factores fundamentales.
Factores estos, que son el apoyo técnico, la distribución de los suministros adecuados, el monitoreo y la capacitación, aspectos de los que deben estar muy pendientes las personas encargadas del Marketing Industrial.
Para referirnos, únicamente, al apoyo técnico (si nos refiriésemos a los cuatro, nos tornaríamos demasiado extensos en la exposición), digamos que los compradores industriales necesitan del apoyo especializado, en caso de fallos en el funcionamiento de lo que, precisamente, han adquirido.
Cuando decimos “especializado”, nos referimos a que sea prestado por personal altamente calificado, preparado y con una formación tecnológica que es fundamental, para poder prestar el apoyo necesario que, dicho sea de paso, suele ser requerido “para ya” por parte de este tipo de clientes exigentes.